Decoración


Decoración

Las personas que van a decorar por primera vez sus casas deben comprar lo básico: una mesa, un sofá con tres o dos butacas, de acuerdo con su presupuesto o con lo que le quepa en la sala. Debe comprarse sillas y mecedoras. La sala requiere de elementos atractivos, bien sea una consola, un mueble bajo con espejo o un mueble bajo con cuadro. Comprendiendo que es lo que deseamos sentir y trasmitir en un determinado espacio, podemos entender que la decoración forma parte de nuestras vidas de manera íntima. Seamos decoradores profesionales o no, siempre estamos buscando la forma de crear y modificar nuestros espacios de convivencia, de estar, de trabajo o de esparcimiento. La decoración de interiores pasó a ser una parte fundamental en el desarrollo de la sociedad, ayudando a crear espacios para un mejor bienestar de las personas, tanto físico, como psicológico y emocional. El salón y sobre todo alrededor de la mesa del comedor es el lugar donde nos reunimos con la familia y amigos. Es importante, en función de cómo se organiza el espacio hacer una buena distribución del mobiliario. Para conseguir un efecto visual más luminoso y amplio de un espacio, se deben utilizar espejos y colores claros en paredes, suelos y mobiliario en general. Se debe conformar un espacio único sin demasiadas subdivisiones y procurar tener bastantes zonas de almacenamiento. La nota de color recae entonces en la decoración con los distintos complementos. Si tienes una vivienda pequeña un truco muy útil es utilizar muebles modulares multifunción, mesas abatibles ó mobiliario apilable son una buena solución ya que  conjugan varios usos en un mismo espacio y son adaptables a cualquier estilo decorativo. Optar por una ducha en lugar de una bañera, ó incorporar muebles colgados en la pared son una buena solución para aprovechar el espacio. Se han de emplear sólo aquellos elementos imprescindibles para permitir la mayor comodidad posible. Una manera fácil y divertida de personalizar el dormitorio es mediante la ropa de cama. Colores frescos, estampados florales y tonos alegres para dar dinamismo. Tonos tierra, colores crudos para dotar de calidez. Sábanas, colchas finitas para dar sensación de ligereza y colchas, mantas gruesas para dar sensación de confort. Evita el exceso de mobiliario ya que pueden ser un estorbo y conviertan el dormitorio en un lugar impracticable.